desafortunadamente, nunca... :'(

Uno nunca sabe lo que tiene hasta que lo pierde...

Esta mañana fue la última en que mi Plucky vio el sol salir, lo contempló triste desde la puerta de su pequeña casita...

Muchas veces me caía mal por mustio, pero era un buen perro, siempre me lo demostró...era el más fiel de los perros. Cuando se iba, siempre regresaba y, cuando se quedaba, cada ocasión que me veía venir me recibía con un ladrido tan efusivo que parecía un grito de emoción.Fueron ocho años así, será difícil que ahora sea todo tan diferente.

Voy a extrañarlo mucho, ojalá me perdone todas las veces que no lo traté como merecía. Fue siempre el más cariñoso de los perros, prácticamente tenía un alma humana. Siempre lo sentí así.

Como hubiese dicho el sabio Sr. Páez, te fuiste a vivir

al barrio que hay detrás de las estrellas.

Me cuidaste hasta donde pudiste.

Gracias, Plucky.